¿Cómo gestionar una mala publicidad de una marca?
Como agencia de publicidad de Barcelona, sabemos que una mala publicidad puede llevar a la pérdida de muchas ventas para una empresa. Por eso, es importante que todas las compañías cuenten con un protocolo de actuación para evitar la mala publicidad, pero también que establezca una serie de estrategias a seguir en caso de sufrir comentarios negativos.
Hoy en el blog de V3rtice explicaremos algunos trucos para gestionar la mala publicidad de una marca. Lo primero que hay que hacer cuando se sufre una situación de crisis que puede afectar a la reputación de una empresa es reconocer que hay un problema. Si nos negamos a verlo, estos pueden empeorar y hacer peligrar la existencia de la marca. Una vez reconocido que hay un problema, será más fácil identificarlo y como consecuencia, poner en marcha un plan de actuación.
Cuando se sufre una situación de mala publicidad hay que actuar inmediatamente, pero adoptando un enfoque lento y progresivo. Es decir, cambiando poco a poco la imagen de la marca hasta que el público vuelva a relacionarla con valores positivos. Así por ejemplo, si se trata de un restaurante de comida rápida que ha sido acusado de causar obesidad, no puede pretender que en el primer día que lance un spot promocionando sus ensaladas, todo el mundo se lo crea. Sin embargo, a través de esta acción y de otras que vinculen la empresa con productos de calidad y nutritivos, se puede recuperar la buena reputación.
De esta manera, es necesario crear contenidos positivos de calidad y optimizarlos para que ocupen las primeras posiciones en los buscadores como Google. Estos contenidos pueden redactarse a través de algún blog de la empresa, de su página web, de una entrada en Wikipedia o a través de las redes sociales. Además de redactar contenidos positivos propios, también es muy útil contar con contenido escritos por terceros que den credibilidad a nuestra marca. En este sentido, una buena idea es crear algún evento o rueda de prensa destinado a los medios de comunicación para que hablen de la empresa.
Por otro lado, es muy importante monitorizar todo aquello que se dice de nuestra marca a través de herramientas como google analytics, para así prevenir errores o definir estrategias de comunicación. Finalmente, en el caso de recibir comentarios negativos a través de las redes sociales o las webs, hay que responder amablemente, siempre pidiendo perdón y admitiendo los errores, en caso de que los haya, y proporcionando alguna solución provisional. Por eso, hay que cuidar al máximo nuestros usuarios y tratar de hacer nuestros sus problemas, para que no se sientan ignorados.
En definitiva, construirse una buena reputación es un trabajo arduo y laborioso, que requiere de tiempo y paciencia. A veces basta con un pequeño error para desencadenar un efecto dominó y que tu empresa sea vista con malos ojos. Por ese motivo, hay que siempre contar con un plan de actuación que marque las estrategias que hemos de seguir en caso de una situación de crisis y prevenir las siguientes que puedan venir.